Un equipo estadounidense informa, como primicia, que una mujer de 24 años, anteriormente infértil, que había recibido un trasplante de ovario de su hermana gemela ha logrado dar a luz un bebé sano.

Stephanie Yarber de Muscle Shoals, Alabama, dio a luz el lunes en la noche a una hija luego de recibir un trasplante el año pasado de su hermana, Melania Morgan, según las noticias.

El trasplante de ovario es un nuevo método para restablecer la fertilidad de las mujeres cuyos ovarios no funcionan normalmente. Sin embargo, se trata de un procedimiento invasivo y conlleva riesgos similares a los de cualquier trasplante de órgano.

Aunque el procedimiento tuvo lugar entre gemelos, lo que evita posibles aspectos de rechazo de tejidos, los expertos esperan que con el tiempo funcione en la población en general.

«Probablemente estemos haciendo más de eso en el futuro», aseguró el Dr. Hugh Taylor, profesor asistente de endocrinología reproductiva e infertilidad de la Facultad de Medicina de la Universidad de Yale. «Esto incluirá la congelación de ovarios para mujeres que se sometan a quimioterapia y otros procedimientos que podrían causar la pérdida de la función ovárica«, agregó.

Este gran avance fue dado a conocer en un artículo publicado el martes por el New England Journal of Medicine para que coincidiera con el parto. El informe aparecerá impreso en la edición del 7 de julio de 2005. El equipo de trasplante estuvo dirigido por el Dr. Sherman Silber, del Hospital de San Lucas en San Luís.

Según el informe, los ovarios de Yarber comenzaron a funcionar de manera anormal cuando tenía 14 años. Su hermana gemela tenía ovarios normales y tuvo tres hijos, los cuales fueron concebidos de manera natural.

La gemela estéril había intentado la terapia de donación de óvulos, la cual no funcionó. Con un ovario donado por su hermana, los médicos trasplantaron tejido ovárico a los ovarios de la hermana estéril.

En un plazo de tres meses luego del trasplante, el ciclo menstrual de la hermana estéril regreso y concibió durante el segundo ciclo. Los investigadores informaron que luego de un embarazo normal de 38 semanas dio a luz una niña sana.

Debido a que las hermanas eran gemelas, no había temor de rechazo de tejidos u otros problemas, los cuales son comunes en otros trasplantes.

«Aunque el trasplante de ovarios entre gemelos monocigóticos (univitelinos) será poco común, la demostración de que la función ovárica se puede restablecer y de que la concepción natural y el embarazo exitoso se pueden lograr luego del trasplante del tejido ovárico podría tener implicaciones más generalizadas para preservar la fertilidad de las mujeres jóvenes, por ejemplo aquellas que necesitan un tratamiento contra el cáncer potencialmente esterilizante», concluyeron los autores.

La técnica tiene el potencial para cambiar la manera como piensan las mujeres acerca de tener hijos, aseguró Taylor. Especuló que las mujeres que deseen retrasar tener hijos podrían querer hacerse congelar sus ovarios para que les fueran retransplantados posteriormente.

«El trasplante de ovarios puede funcionar como profilaxis contra el envejecimiento y el decaimiento de la función ovárica a medida que las mujeres continúan con sus carreras y demás, mediante el retraso de la llegada de los hijos», explicó.

Al remover una parte de su propio ovario y congelarlo, que el tejido puede ser trasplantado posteriormente sin temor al rechazo y restablecer potencialmente la fertilidad, anotó Taylor.

«Me parece que el potencial es enorme», dijo. Sin embargo, recalcó que este informe no prueba que el óvulo realmente provenga del ovario donado. «Este ha sido otro problema con otros informes de embarazos luego de trasplante de ovarios«. El experto de Yale también anotó que la insuficiencia ovárica prematura revierte espontáneamente entre el 5 y el 10 por ciento de los casos.

Lo más importante es que, aunque el uso del trasplante de ovarios aumente sin lugar a dudas, no reemplazará la donación de óvulos, la cual es sumamente exitosa y no es tan invasiva como un trasplante, explicó Taylor.

«El papel del trasplante de ovarios será para quienes desean conservar su fertilidad voluntariamente», dijo. Podría ser porque están teniendo tratamientos de radiación o saben que van a retrasar tener hijos por muchos años. Ese es el futuro de la preservación de la fertilidad«.

Otro experto se mostró más cuidadoso. «Se trata de algo notable, pero no es algo que ayudará a muchas pacientes», aseguró el Dr. Jaime A. Grifo, director de la División de Endocrinología reproductiva del Centro Médico de la Universidad de Nueva York y profesor de la Facultad de Medicina de la NYU. «No muchas personas con insuficiencia ovárica tienen una hermana gemela».

En cuanto a las mujeres sometidas a tratamiento contra el cáncer, Grifo se muestra escéptico en cuanto a la utilidad del congelamiento del tejido ovárico. «El problema es saber de qué cáncer se está hablando», dijo. «Si se trata de cáncer de ovarios, no es una opción. Si se trata de otros cánceres, de todos modos se preguntará si afectará su cáncer». Las técnicas más seguras serían congelar óvulos o embriones, sostuvo Grifo.

En cuanto a la preservación de la fertilidad, Grifo considera que la técnica es demasiado invasiva para hacerla práctica. «Es muy invasiva para eso», sostuvo. «Y congelar el tejido y hacer que funcione, pues, no se ha hecho hasta ahora».

Fuente:

Steven Reinberg Reportero de HealthDay
Traducido del inglés: Miércoles, 8 de junio, 2005
MARTES 7 de junio (HealthDayNews/HispaniCare)