Fuente: elmundo.es CRISTINA DE MARTOS/MADRID.-

Científicos australianos han logrado identificar y aislar lo que con mucha probabilidad son células madre del endometrio, la capa interna del útero. Este descubrimiento, que se encuentra en una etapa muy preliminar, podría ayudar a comprender mejor por qué aparecen determinadas enfermedades como la endometriosis o brindar una vía terapéutica para algunos trastornos.

Lo más destacado de este estudio, publicado en la revista ‘Human Reproduction’, es la identificación de los dos marcadores que permiten diferenciar estas células multipotenciales de las demás células que componen el endometrio uterino. Estas dos moléculas permitieron a Caroline Gargett y Kjina Schwab, investigadoras del Centro Médico Monash de Victoria, Australia, aislar un grupo de células de 17 muestras de tejido endometrial.

Tras la separación, Gargett y Schwab pusieron todo el material en cultivo para observar el crecimiento de las colonias. A los 15 días, las células marcadas con CD146 y PDGF-Rß, mostraron una capacidad 15 veces superior que las demás para formar colonias, uno de los rasgos distintivos de las células madre.

Para averiguar si se trataba realmente de este tipo celular, las investigadoras expusieron a varios grupos celulares a ambientes para inducir la diferenciación a células óseas, adiposas y musculares. Cuatro semanas después las colonias expresaban marcadores característicos de estos linajes. Otra buena noticia.
Similitudes con otras células madre mesenquimales (MSC)

Este tipo de células madre procede de una estructura embrionaria llamada mesodermo. Se ha descrito la presencia de MSC en la médula ósea y en el tejido adiposo, entre otros. Estas células poseen una serie de marcadores de superficie que permite su identificación.

Gargett y Schwab decidieron buscar estos rasgos característicos en las células que habían encontrado y los resultados sugieren que “tienen un fenotipo similar” al de las MSC procedentes de estas estructuras.

Además, las células endometriales halladas estaban localizadas en la capa basal, alrededor de los vasos sanguíneos, igual que las óseas, las adiposas y las de la pulpa dental. Por todo ello, las autoras sugieren que “son MSC”.
Futuras aplicaciones

El endometrio es la capa del útero que crece para poder acoger al embrión y que se descama todos los meses en el caso de que no haya concepción. “Es muy probable que estas MSC tengan un papel importante en esta regeneración cíclica”, apuntan las autoras.

Además, es muy probable que intervengan en la patogénesis de algunas enfermedades ginecológicas como la endometriosis o la adenomiosis y podrían ser útiles en el tratamiento del prolapso pélvico, aunque las primeras aplicaciones no llegarán, mínimo, hasta dentro de una década.

http://elmundosalud.elmundo.es/elmundosalud/2007/09/13/mujer/1189705991.html

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