Hacer la declaración de la renta en una pequeña y mediana empresa (PYME) puede parecer complicado, pero es un proceso clave para garantizar el buen funcionamiento de tu negocio y evitar problemas con Hacienda. Si eres dueño de una pyme, probablemente ya sabes que cumplir con tus obligaciones fiscales es fundamental. Pero, ¿por qué es tan importante hacerlo bien? Y más aún, ¿ cómo asegurarte de que no estás pasando nada por alto? Vamos a verlo paso a paso.

El primer paso: no olvidar los impuestos y declaraciones trimestrales 

Un error común es pensar que solo basta con tener las cuentas en orden a final de año, cuando en realidad la clave está en llevar un control riguroso durante todo el ejercicio. En una pyme, no solo hay que hacer la declaración de la renta anual, sino que también se deben declarar los impuestos de forma trimestral a través de diferentes modelos.  

Entre los más comunes se encuentra el modelo 303, que corresponde a la liquidación del IVA, el impuesto que grava el valor añadido de los productos o servicios que ofreces.  Declarar el IVA puede parecer complicado a prior, pero siguiendo una buena guía que explique exhaustivamente cómo se rellena el modelo 303 no tendrás problema. Este modelo es esencial para que Hacienda sepa cuánto has cobrado de IVA a tus clientes y cuánto has pagado de IVA en tus compras para poder solicitarte o devolverte el dinero correspondiente.

También está el modelo 111, que se utiliza para declarar las retenciones practicadas a los trabajadores, profesionales o empresarios, y es fundamental cuando la empresa tiene empleados o trabaja con proveedores a los que se les retiene IRPF. Otro modelo esencial es el modelo 130, que sirve para la autoliquidación del pago fraccionado del IRPF en el caso de autónomos y socios de pymes que tributan en estimación directa. Este modelo permite ir adelantando a Hacienda una parte de los beneficios obtenidos cada trimestre. 

Por otra parte, si la pyme paga alquileres por sus locales o establecimientos, deberá presentar el modelo 115, donde se declaran las retenciones aplicadas en los pagos de alquileres. Estos modelos trimestrales son claves para mantener las cuentas fiscales al día y evitar problemas con Hacienda, siendo importante llevar un control estricto para cumplir con las fechas y evitar sanciones.

Rellenar correctamente la declaración de la renta

El modelo 100 de IRPF es la declaración de la renta en sí. Este formulario recoge la información sobre los ingresos obtenidos a lo largo del año y las retenciones aplicadas. Rellenar el modelo 100 de IRPF correctamente es crucial, ya que de aquí depende que pagues lo justo y no más de lo que te corresponde.

Para rellenarlo, lo primero que debes hacer es tener a mano toda la información financiera de tu empresa: ingresos brutos, gastos deducibles, las retenciones que te hayan aplicado y cualquier otro tipo de ingreso o deducción que puedas justificar. Dentro del modelo, deberás identificarte claramente como contribuyente y proporcionar la información personal y fiscal requerida. Después, tendrás que detallar los ingresos netos obtenidos por la actividad de la pyme, restando los gastos que sean deducibles. Algunos de estos gastos pueden ser suministros, alquileres, y salarios de empleados.

La correcta gestión de las horas trabajadas y su impacto en la declaración 

La gestión del tiempo es otro aspecto que puede tener un impacto directo en la declaración de la renta de una pyme, especialmente cuando cuenta con empleados. Contar con una aplicación de control de horas es útil para asegurar que pagas correctamente a tus empleados, ya que al llevar un registro eficiente de las horas, es más fácil gestionar correctamente los salarios y las retenciones correspondientes, evitando así errores en la declaración. Cuanto más preciso sea este registro, menos problemas tendrás con Hacienda en caso de inspección o de dudas sobre las nóminas y los impuestos retenidos.

La importancia de la declaración de la renta en las PYMES

Las pymes están obligadas a hacer la declaración de la renta porque, como cualquier empresa o autónomo, deben rendir cuentas al Estado sobre los beneficios que han generado a lo largo del año. Esto no es solo una obligación legal, sino una forma de contribuir al sistema fiscal del país. Además, mantener tus cuentas al día te ayuda a tener una visión clara de la salud financiera de tu negocio. Dejar de hacer la declaración o hacerlo mal puede traer consecuencias graves, como sanciones económicas e incluso inspecciones por parte de Hacienda.

¿Qué es lo que debes tener en cuenta a la hora de hacer la declaración de la renta de tu pyme? Para empezar, debes asegurarte de que toda la documentación esté en orden: facturas emitidas y recibidas, gastos deducibles, ingresos obtenidos, etc. También es fundamental conocer las deducciones a las que puedes acceder y los plazos en los que debes presentar la declaración.